MONUMENTOS AL SACRIFICIO HUMANO

El mundo está lleno de cosas sorprendentes, gozamos de tantas bellezas naturales como arquitectónicas alrededor del planeta, que sencillamente es muy difícil visitarlas todas en una sola vida. Así mismo gozamos de mucha historias de guerras casi interminables, imperios sangrientos, revoluciones abismales, etc. Lo más increíble de todo es que estas dos caras de la moneda: arquitectura sorprendente y el abuso de poder de antaño, están muy relacionadas entre sí y lo estarán de por vida. Esto es algo que a menudo se olvida.

Tenemos como ejemplo el Coliseo Romano, un anfiteatro de la época del Imperio romano, construido en el siglo I, ubicado en el centro de la ciudad de Roma. Por sus características arquitectónicas, estado de conservación e historia, el Coliseo es uno de los monumentos más famosos de la antigüedad y por eso fue declarada Patrimonio de la Humanidad en 1980 y como una de las Nuevas Siete Maravillas del Mundo moderno el 7 de julio de 2007. Debido a sus archivos históricos se sabe que, a este majestuoso y viejo monstruo de la arquitectura, antes se lo llamaba Anfiteatro Flavio en honor a la dinastía Flavia de emperadores que lo “construyo”. Pero ¿qué de verdad hay en esas palabras? ¿Los Flavio realmente se esforzaron para construirla?  ¿Hicieron muchas inversiones económicas para pagar la mano de obra? Pues la verdad es que toda esta obra maestra de la arquitectura fue hecha, en su totalidad, por esclavos.

A lo largo de toda la historia del imperio romano y su dominio sobre le Mediterráneo, Europa, África, y Asia. La sociedad romana fue muy esclavista, y tanto su economía como su estructura social se basa en un sistema de clases donde los esclavos eran tratados, por la mayoría de sus amos, como animales. La mayoría de ellos se adquirían a través de las guerras, los ejércitos romanos llevaban prisioneros de guerra y una vez en tierras romanas eran vendidos en subastas para terminar como empleados, obreros, prostitutas y gladiadores.

La construcción del coliseo fue financiada mediante la venta de reliquias preciosas tomadas de un templo judío durante el saque de Jerusalén. Esta campaña llevo a 12.000 judíos, en condición de esclavos, a construir el enorme coliseo hasta que terminaran la obra dentro de unos 8 años.

A la caída del imperio romano surgieron diferentes naciones en toda Europa, lo cual dio origen a la edad medieval y trayendo consigo contracciones representativas como la aparición de grandes edificios llamados Castillos hechos con diferentes propósitos pero en su mayoría era la defensa y vivienda de la monarquía y la nobleza. Fueron construidas, en su mayoría por esclavos, aunque en este tiempo no eran considerados como tal, ya que en ese entonces tenían al feudalismo como sistema social.

El monarca era un soberano feudal de sus vasallos a quienes estaba ligado por vínculos recíprocos de fidelidad. Los recursos económicos del rey residían casi exclusivamente en sus dominios personales como señor, y sus llamadas a sus vasallos tenían una naturaleza esencialmente militar. El monarca sólo era señor de sus propios dominios; en el resto de su imperio era en gran medida una figura ceremonial. Dentro del feudo o espacio territorial de los señores vivían campesinos que no eran propiedad personal del señor feudal, pero tampoco eran hombres libres sino “siervos” que tenían la obligación de entregar parte de su trabajo agrícola y de realizar determinadas obligaciones laborales para su señor.

para el siglo X la gran mayoría del campesinado vivía en condición de servidumbre, es decir, los campesinos que ocupaban y cultivaban la tierra no eran sus propietarios. El campesino que era siervo de un señor feudal estaba totalmente sometido a la voluntad de su señor.

En los siglos IV y VII, los principados feudales construyeron murallas defensivas en sus respectivas fronteras con el fin de protegerse de los ataques de las tribus nómadas del norte de China. Después de la unificación de toda China el primer emperador de la dinastía Qin, unió las murallas aisladas existentes en el norte, convirtiéndolas así en la Gran Muralla China.

La Gran Muralla, que tiene una extensión total de más de 6.700 kilómetros, está compuesta de muros, pasos, atalayas y torres, tiene de 7 a 8 metros de altura y una base de 5 a 6 metros de ancho. Las almenas del muro tienen casi dos metros de alto, y también hay troneras para el disparo de flechas y otros proyectiles. En las cimas cercanas se levantan atalayas y torres de señales, que forman una red de comunicación militar.  La Gran Muralla es hoy un puente que enlaza el pueblo chino con los otros países y regiones del mundo.Pero al igual que los castillos medievales de Europa, esta majestuosa muralla también fue construida por campesinos a órdenes de sus señores feudales.

Para muchos son considerados bellezas arquitectónicas o maravillas del mundo, para otros son una representación simbólica de la violencia de la época, un monumento al sacrificio humano y al abuso de poder de antaño, una representación a las necesidades de un pueblo oprimido por la monarquía.

Este tipo de edificaciones nos plantean varias hipótesis, ¿Era necesario para el desarrollo de la humanidad acontecimientos de esta índole como esclavismo, guerras y otro tipos de catástrofes?,  O simplemente ¿Es una representación de la autoridad por tratar de ganar más poder?, Saquen sus propias conclusiones, pero de algo que si estamos seguros es de que todos estos acontecimientos son parte de la historia de la humanidad que sirven de ejemplo y de educación no sólo a la población, también a futuros mandatarios o gobernantes de distintos país.